“¡Cristiano, rompe con la superstición!”

Mi pueblo fue destruido, porque le faltó conocimiento"

(Oseas 4:6)

Hoy el Espíritu Santo viene a desenmascarar una trampa del enemigo: la superstición dentro del pueblo de Dios. Muchos creyentes, por falta de conocimiento o por costumbre cultural, están practicando cosas que abren puertas espirituales al enemigo. Y lo peor: lo hacen pensando que no hay problema, porque "todo el mundo lo hace".

Pero el Señor dice: ¡No puedes servir a Dios y al mismo tiempo mantener prácticas supersticiosas!

 ¿Qué es superstición?

La superstición es creer que ciertos objetos, rituales o acciones tienen poder espiritual por sí mismos, fuera de la voluntad de Dios. Es una fe falsa, desviada de la Palabra. Es poner tu confianza en algo que no es Cristo.

Ejemplos comunes entre cristianos:

• Poner canela con alcanfor en la casa "para alejar malas energías"

• Usar brazaletes tejidos “para protección”

• Tener objetos “consagrados” sin saber su origen espiritual

• Encender velas para atraer bendición

• Creer que el espejo puede reflejar lo malo o proteger

• Evitar romper un vaso de vidrio “porque trae mala suerte”

⚠️ Todo esto es superstición. ¡Y el enemigo se alimenta de la ignorancia del pueblo de Dios!

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📖 2. Dios condena la mezcla

"No se hallará en ti quien practique adivinación, ni agorero, ni sortílego, ni hechicero… porque es abominación para con Jehová"
(Deuteronomio 18:10-12)

No podemos ser cristianos los domingos y supersticiosos entre semana. No podemos orar en la iglesia y después poner velas o seguir “rituales caseros” para abrir los caminos.

Cuando Dios dice “no practiques esas cosas”, no lo dice por capricho, lo dice porque abren portales espirituales reales. Son prácticas de las tinieblas disfrazadas de costumbres “inofensivas”.

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🧠 3. El peligro de lo “inocente”

“Pero yo lo uso por decoración”, “eso no significa nada para mí”, “yo no lo creo, pero lo tengo en casa por si acaso…”

⚠️ Escucha esto: el mundo espiritual no se mueve por intención, sino por legalidad.

Si tienes en tu casa objetos consagrados, si sigues prácticas con raíces ocultistas, estás dando derecho legal al enemigo para influir en tu vida. Aunque no lo sepas, tu ignorancia no te protege.

"No ignoramos sus maquinaciones"
(2 Corintios 2:11)

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💣 4. Rompe con la superstición hoy mismo

• Renuncia a todo objeto, costumbre o práctica que no venga del Espíritu de Dios.

• Purifica tu casa. Examina tus adornos, tus pulseras, tus libros, tus rutinas.

• No tomes café, comida o bebida de todo el mundo sin discernimiento. No es paranoia, es protección espiritual.

• No pongas tu fe en cosas, pon tu fe en Cristo.

"Y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres."
(Juan 8:32)

Conclusión: Una fe sin mezcla

Dios no quiere creyentes supersticiosos. Dios quiere hombres y mujeres llenos del Espíritu Santo, firmes en la verdad, libres de toda contaminación espiritual.
Hoy es el día para decir: ¡basta de mezcla! ¡Basta de superstición! Yo soy de Cristo, y solo a Él serviré.

Oración final:

“Señor, hoy renuncio a toda superstición, a todo objeto o práctica que haya traído contaminación a mi vida o a mi casa. Dame discernimiento para ver lo oculto y fuerza para soltar lo que no te agrada. Yo declaro que mi confianza está solo en ti, mi protector, mi proveedor y mi libertador. En el nombre poderoso de Jesús, amén.”