un demonio es un ser espiritual de naturaleza angélica condenado eternamente.
No tiene cuerpo, no existe en su ser
ningún tipo de materia sutil, ni nada semejante a la materia, sino que se trata
de una existencia de carácter íntegramente espiritual. Spiritus en latín significa soplo,
hálito. Dado que no tienen cuerpo, los demonios no sienten la más mínima
inclinación a ningún pecado que se cometa con el cuerpo. Por tanto la gula o la
lujuria son imposibles en ellos. Pueden tentar a los hombres a pecar en esas
materias, pero sólo comprenden esos pecados de
un modo meramente
intelectual, pues no tienen sentidos corporales. Los pecados de los demonios,
por tanto, son exclusivamente
espirituales.
Los demonios no fueron creados malos. Sino que
al ser creados, se les ofreció una prueba, era la prueba previa antes de la
visión de la esencia de la Divinidad. Antes de la prueba veían a Dios pero no
veían su esencia. El mismo verbo ver
resulta aproximativo, pues la visión de los ángeles es una visión intelectual.
Como a muchos les resultará muy difícil entender cómo podían ver/conocer a
Dios, pero no ver/conocer su esencia habría que proponer como comparación que
sería como decir que ellos veían a Dios como una luz, que le oían como una voz
majestuosa y santa, pero que su rostro seguía sin desvelarse. De todas maneras,
aunque no penetraran su esencia, sabían que era su Creador, y que era santo, el
Santo entre los Santos.
Comentarios
Publicar un comentario