Por un niño
Oremos: Señor, tú que conoces nuestra
profunda tristeza por la muerte del (de la) niño(a) N., concede a quienes
acatamos con dolor tu voluntad de llevártelo(a), el consuelo de creer que vive
eternamente contigo en la gloria. Por Jesucristo nuestro Señor.
Por un joven
Oremos: Concede, Señor, la felicidad de la gloria eterna a tu siervo(a) N. a quien has llamado de este mundo cuando el vigor de la juventud embellecía su vida corporal; muestra para con él (ella) tu misericordia y acógelo(a) entre tus santos en el canto eterno de tu alabanza. Por Jesucristo nuestro Señor.
En caso de accidente o suicidio
Oremos: Escucha, Señor, las súplicas de tu pueblo unidas a las lágrimas de dolor que sentimos por la muerte inesperada de nuestro(a) hermano(a) N., y haz que alcance tu misericordia y goce para siempre de la luz de aquella patria en que no hay más sufrimiento ni muerte.
Comentarios
Publicar un comentario